• República del cacao (día 5)

    REPUBLICA DEL CACAO

    Los que me conocéis ya sabéis de mi afición casi enfermiza al chocolate. En Quito se abrió hará como unos 5 meses la primera tienda República del Cacao y es que Ecuador

    es uno de los principales productores de este producto. Tiene toda la pinta de que dentro de unos años se convertirá en una franquicia con sucursales en Tokio, Londres, Paris, Madrid, etc.

    Van pasando los días y me estoy dando cuenta de la cantidad de coches americanos con 30 años a sus espaldas que circulan por este país. Puedes toparte con 4 o 5 cada día. Adoro esos coches porque tienen personalidad. Es una lastima que yo, por culpa de mis conocimientos nulos de mecánica, no pueda poseer uno en España porque las piezas, el mantenimiento y también el consumo, los convierten en un pozo sin fondo en el que se caerían todos los billetes de 50€ que pasaran por mis manos.

    Por la noche disfruté de mi primera fiesta aquí en Quito. Eric celebraba su cumpleaños en su espectacular casa con cervezas, parrillada, música y piscina climatizada. Probé una bebida alcohólica que es muy común aquí, el Zhumir de sandía, y se nos hizo las 4 de la mañana a ritmo de Danza Kuduro, reggaeton y, para mi sorpresa, Armin Van Buuren.

    DieQuito

  • Una noche en las termas de Papallacta (día 4)

    AGUAS TERMALES

    SPA VOLCANICO

    termas de PAPALLACTA

    TERMAS

    Ayer Andrés, Stephy, Martha, Daniel y yo cogimos un 4×4 y partimos por una carretera de montaña en dirección a Brasil con destino a las termas de Papallacta, en el Parque Nacional Cayambé-Coca. Por el camino presencié varios adelantamientos temerarios de autobuses a camiones en plena curva. El único que pareció sorprendido era yo.

    Al llegar nos dio la bienvenida un fascinante cielo estrellado que brinda el lugar debido a su altitud: 3250 metros. En las inmediaciones se veían picos más altos que te hacían sentir insignificante.

    Entramos en el complejo y nada más acceder me cautivaron las piscinas, que destilaban tupidos vapores, y la frondosa vegetación de la zona. Cuando estuvimos listos me acerqué a una de estas, a priori inofensivas, zonas de baño y metí el pie para sacarlo inmediatamente después con sensación de quemazón. ¡Qué barbaridad! En su web aseguran que las estas aguas fluctúan entre 36º y 40º pero eso es muy difícil de creer. Esta piscina (imagen 1) rondaría los 65º. Al final te conseguías meter hasta los hombros pero no se estaba bien, te sentías como una patata en la olla; era demasiado.

    Más tarde fuimos a otra piscina que estaba sendero abajo y la temperatura de esa si que debía de moverse por la cifras oficiales. Allí se estaba perfecto y más si tenemos en cuenta que fuera corría una brisita que te helaba hasta los tuétanos.

    Estas aguas hipertermales existen debido a la intensa actividad volcánica de la región. Esta semana entró en erupción el volcán Tungurahua que se halla a unos 100 kms de Quito. Ya hay alerta naranja pero el magma no podría ni acercarse por aquí, de la ceniza ya no estoy tan seguro.

    DieQuito

     

  • La plaza Fosh (día 3)

    PLAZA FOSH

    En la Plaza Fosh se había preparado un gran tinglado con el Madrid-Barcelona que se jugaba a 10000 kms de aquí. Globos azules y rojos, blancos y negros, una pantalla gigante, bares repletos de fans sudamericanos de estos dos equipos, gente con bufandas y camisetas… Del resultado del partido ni me acuerdo.

    En esta Plaza destacan sus múltiples bares de cócteles (Azuca, Dragonfly, etc), una cervecería llamada Chelsea decorada con escudos y colores del equipo de Abramovich, un restaurante italiano llamado Cinquecento, un Barbacue-Bar decorado al estilo oeste, el Sports Bar: un templo de los deportes que es propiedad del presidente del club de fútbol Liga de Quito y una tienda-café dedicada al culto al chocolate (República del Cacao). Además hay varias tiendas especializadas en ropa de montaña y accesorios, unas cuantas agencias de turismo y discotecas (Atlantis, Fire, Oceans…) que todavía no he tenido el placer de disfrutar.

    Cambiando de tema, el invierno está llegando a su fin. A partir de mediados de mayo será verano y mejorará el clima porque, de momento, llueve todos los días.

    Ayer tuve la suerte de probar una fruta del Valle de Cumbayá, que es donde está mi hotel. Se llama Guaba y es una de las cosas más dulces que he probado jamás.

    Para despedirme, una curiosidad. Dentro de dos fines de semana hay votaciones. Y el voto en Ecuador no es un derecho, es una obligación y sino vas a las cabinas aunque sea para votar en blanco puedes ser sancionado y te negarán durante un tiempo los visados para salir del país.
    Quizás sea buena idea para fortalecer las democracias jóvenes pero me ha chocado muchísimo.

    DieQuito

  • Curiosidades quiteñas (día 2)

    curiosidades quiteñas

    Las curiosidades quiteñas son variadas. En primer lugar, las relativas al clima Soleado por la mañana, aguacero por la tarde. Así se comporta el tiempo en Quito los días que hace mucho calor antes del mediodía. La evaporación de la humedad se revierte cuando bajan las temperaturas y el agua vuelve a la Tierra en forma de chaparrón.

    A pesar del agua, estuve de paso por el pintoresco barrio de Guápulo. Este sector se caracteriza por sus casas levantadas en empinadas barranqueras que descienden hasta el río Machángara. La aglomeración de estas construcciones le confiere a las laderas del valle el aspecto de un enorme rompeolas.

    ¡Los taxis son baratísimos aquí! Me parecen unas tarifas irrisorias. Pagas 1 dólar por un viaje que en cualquier ciudad de España costaría 10 euros (14 dólares).

    Por último, una escena me dio especial lastima. En la Plaza Fosh, uno de los centros turísticos de la ciudad, se me acercó un niño de menos de 10 años ofreciéndome tabaco de toda clase de marcas.

    Imagen: skyscraperlife

    DieQuito

  • Primer amanecer en Quito (día 1)

    AMANECER QUITO

    Esta foto es mi primer amanecer en Quito. Llegué ayer al hotel sobre las 6:30 de la mañana hora española. Habían pasado 22 horas y media desde que abandoné mi casa cargado de maletas. Os podéis imaginar lo cansado que me encontraba.

    Mi primera impresión sobre Quito:

    Ya desde el aire era palpable la accidentalidad del terreno. Es una ciudad enclavada sobre colinas y montañas que está a una altura demencial: 2835 metros (la montañita que veis en la imagen rondará los 4000 metros). En el coche pude comprobar que San Francisco de Quito tiene cuestas pronunciadas al estilo San Francisco. Sí, las de las persecuciones.

    Hoy mismo voy a empezar a hacer gestiones importantes. A las 10 de la mañana tengo cita para ver un «departamento» (así le llaman aquí a los apartamentos) después de eso me acercaré a un banco para abrir una cuenta y por último trataré de conseguir un móvil con internet.

    DieQuito

  • En búsqueda de hogar (faltan 5 días)

     CASA DE LEGO

    BÚSQUEDA DE HOGAR

    No es que se me haya echado el tiempo encima. Mis motivos para que, a estas alturas, esté todavía buscando casa son dos: en primer lugar no quiero comprometerme con ningún propietario sin ver el piso en persona; el segundo motivo y no menos importante es que no quiero entrar en mi nuevo hogar hasta el 1 de mayo.

    Así pues, todavía faltan 10 días. JUEGOS DE CONSTRUCCION
    No obstante, una amiga mía quiteña que conocí en un curso de inglés hará como unos 5 años ya está concertando citas en varios inmuebles para empezar a visitarlos a partir del martes 26.

    Las fotografías…Qué más quisiera que poder tener una casa así en mi etapa en Ecuador, en una escala mayor evidentemente. Pero algo me da en la nariz que mi vivienda latina se parecerá a esta mansión lo que una televisión en blanco y negro a un televisor de plasma. Cualquier lugar me vale, pero ya que me puse con mi hermana pequeña a jugar a los Lego, esa gran pasión de mi infancia que ha estado recluida más de 12 años encima del armario, preferí construir un chalet digno de Sandbanks, Beverly Hills o La Moraleja. Las placas solares son lo más. ; )

    DieQuito

  • Cena de despedida (faltan 8 días)

    CENA DE DESPEDIDA

    MENU QUITEÑO

    TORTILLA AGUACATE

    LLAPINGACHO

    Entramos en la última semana. El fin de semana ha estado cargado de despedidas, la más especial una cena en petit comité para la cual cociné platos típicos de Ecuador (foto 1).

    De primero, un Llapingacho (tortilla de patatas y aguacate (foto 2), lechuga, tomate y chorizo rojo).
    De segundo plato, el Churrasco Ecuatoriano (churrasco, huevo frito, patatas asadas y arroz). Foto 3.
    Y de postre una Pineapple Surprise(foto 4) (el nombre es cosecha mía), que tenía una piña natural rellena con la famosa Piña Colada (zumo de piña, batida de coco, ron Seven Tiki, leche condensada y hielo picado) En el resto del plato había trozos de piña, dos plátanos y chucherías con formas de fruta. Para rematar, el conjunto estaba decorado con sombrillas tipo cocktail, un collar de flores y bengalas.

    En el centro de la mesa había platanitos fritos típicos de Ecuador. En cuanto a las bebidas; hubo Lambrusco, cerveza, sidra y una bebida ecuatoriana con sabor tropical.

    Cuando regrese, prometo hacer otra cena latina pero con un poco más de experiencia.

    DieQuito

  • Maletiuskas (faltan 15 días)

    EQUIPAJE

    El equipaje, ese gran quebradero de cabeza. Tengo muchos días por delante, lo sé; pero no puedo dejar de pensar que dentro de pocos días tendré que empezar a seleccionar los objetos personales que me llevo al otro lado del Atlántico. 33 kilos de ropa, zapatos, cuidado personal y objetos electrónicos.

    La eterna sensación de que te estas dejando algo de vital importancia me asaltará a cualquier hora del día: desayunando, conduciendo, viendo los clásicos…Seguro que al final me olvido el pijama, la toalla o el cepillo de dientes. El nómada suele tener estos contratiempos.

    DieQuito

  • Abril, el mes del viaje (faltan 23 días)

    VIAJE ABRIL

    Abril. Ayer ya tuve el placer de disfrutar de una bebida fría, un sol de justicia y la brisa del Pirineo en la que fue mi primera terracita del año. La primavera llegó hace una semana y, ahora, se ha instalado esperemos que definitivamente. Dicen que, la llamada estación de las flores, altera la sangre; a mí me alterará los nervios porque nunca había tenido un viaje así en perspectiva.

    Y es que al comenzar abril, realmente, lo que ha comenzado es la cuenta atrás para mi aventura latinoamericana.

    DieQuito