Tras una escala en el aeropuerto de Roma aterrizamos en el aeropuerto Indira Gandhi, en el que nos recibió Vinay, el que, en su día, me acompañó en mi viaje en bici from Nueva Delhi to Nanda Devi hace ya más de 5 años. Fue una gran alegría verle. Nada más salir del avión ese aroma picante y rancio invadió nuestras fosas nasales. ¡Qué recuerdos de cuando estuve viviendo aquí! Vinay, como buen chofer que es, nos llevó al hotel de Okhla en el que caímos rendidos.
Hoy por la mañana, tras un baño en la piscina y un desayuno impresionante nos hemos ido al Old Delhi, pasando por el palacio de Gobernación, tan característico de la arquitectura de Luthiens y con su color asalmonado. Old Delhi estaba tan lleno de vida como siempre. Las calles mugrientas, tiendas de todo tipo de objetos, comida callejera, vaporosos olores y brillantes puestos de sarees. A partir de aquí Carmen se ha dado cuenta de lo mucho que usan el claxon en este país, sonido que ya no nos abandonará hasta nuestra marcha.
A la hora de comer hemos quedado con mi amigo Guru antiguo compañero de la embajada al que hacía cinco años que no veía. Nos ha llevado a un sitio tradicional cerca de su trabajo actual. Por la tarde hemos visitado Lodi Gardens acompañados también de mi amigo Dyvanshu.
Esto ha sido todo en Delhi, ciudad de entrada en nuestro viaje para India. Ahora embarcamos en nuestro vuelo hacia Varanasi.
DieQuito
Comentarios recientes