Hoy voy a dedicarle otro artículo a los modos de transporte de Delhi y es turno para los Autorickshaws, o como reza el título, tuc tucs.  Aquí la gente los conoce por simplemente Auto.

Los autos son unos endebles triciclos hechos de hojalata, una pequeña estructura más o menos rígida en la parte inferior y una desmontable en la superior.

Su llamativa mezcla de colores que combina un amarillo limón y un verde hoja hace que los viandantes los vean desde la lejanía durante el día. Por la noche se distinguen por su único foco de luz amarillento.

Sus conductores tienen fama de muy piratas y casi nunca te conectan el reglamentario contador. Si te ven con pintas de occidental te ofrecen un precio prefijado que llega a cuatriplicar en ocasiones el precio normal. Lo mejor es acercarse hasta ellos con un policía, porque estos les obligan a cumplir la ley.

Algunos llevan equipo de música, imágenes religiosas y el asiento forrado en piel, otros son en cambio un auténtico desastre en el cual ya nada se sostiene en pie. Hay que añadir antes de acabar que funcionan con gas, para contaminar menos la ya de por sí ahumada Nueva Delhi. Si visitas la ciudad, debes montar en uno de estos simpáticos autos locos.

InDieQuito

Imagen: travelandleisure